Historias
La música electrónica y el rock en México.
Aunque en la década de los 80 ya había bandas que habian incursionado con la música electrónica en el rock progresivo, fue hasta los finales de los 90 y el nuevo milenio cuando este género sobresale con mayor recepción en México.
Sintetizadores, mezcladoras, entre otro tipos de intrumento han refrescado la música con el pasar de los años haciéndolo uno de los géneros más populares en la historia de la música.
La electrónica se ha fusionado con diversos estilos, sin embargo en el rock también le ha dado una variante incluso hasta más psicodélica, progresiva y experimental.
En el rock a nivel mundial presenta ejemplos de bandas quienes han fusionado su proyecto musical han creado grandes temas incluso desde épocas un tanto ‘rupestres’ tecnológicamente hablando, en el rock en México también hay ‘tela de donde cortar’.
Para ello tenemos que remontarnos en los años 80, donde empieza a notarse un gran avance tecnológico, y claro el rock empieza a resurgir, haciéndolo aún más llamativo, ejemplos como Via Lactea, Oxomaxoma, Alex Eisenring, Luis Pérez, Casino Shangai y Artefakto incursionaban con buena recepción.
En los 90 algunas bandas siguen utilizando instrumentos un tanto más eléctricos pero con armonías y beats, sin embargo había otros proyectos un tanto más apegados a la electrónica e incluso fusionándose con géneros musicales más regionales.
Para esto nos enfocamos primeramente en la ciudad fornteriza de Tijuana, donde nace el Nortec Collective, un colectivo con un estilo que fusiona la música norteña y banda (en algunas ocasiones con conjuntos en vivo) con elementos electrónicos, este colectivo estaba conformando por Pepe Mogt ‘Fussible’, Ramón Amezcua ‘Bostich’, Fernando Corona ‘Terrestre’, Ignacio Chavez Uranga ‘Plankton Man’, P.G. Beas ‘Hiperboreal’, Jorge Verdín ‘Clorofila’, tiempo después los integrantes se separarían.
En Guadalajara también había una propuesta llamada Sussie 4, en donde sus influencias estaban un tanto más enfocadas hacia el subgénero House, proyecto conformado por César Gudiño y Odin Parada.
En Monterrey en plena época de la ‘avanzada regia’ llega Kinky con un estilo un poco similar al Nortec, sin embargo presenta un poco más de rock así como una mayor lírica en la mayoría de sus temas; así como Toy Selectah, quién después de su paso con Control Machete presenta su proyecto de electrónica y cumbia.
Te recomendamos: Reggae en México.
La capital de nuestro país no se podia quedar atrás, donde empiezan a surgir proyectos como Titán conformado por Jay de la Cueva, Julián Lede, Emilio Acevedo, (estos dos últimos músicos ya habían incurdionado con Melamina Ponderosa), cabe señalar que tanto Acevedo como Lede tendrían proyectos alternos; Maria Daniela y su Sonido Lasser Sonido Lasser Drakar y Silverio respectivamente.
En la capital la cumbia es un estilo que tiene alta popularidad, aquí emerge el DJ y productor Camilo Lara con el Instituto Mexicano del Sonido, un proyecto lleno de beats, cumbia y sátira social, tiempo después también haría mancuerna con Toy Selectah conformando Compass.
También en la capital, saldrían un par de personajes directamente de otra galaxia, cargados con un proyecto meramente EDM; The Wookies.
En un plano un tanto más popero en la primer década ‘dosmilera’ salen a relucir proyectos como Moenia, teniendo una gran popularidad (en donde Juan Carlos Lozano saldría del proyecto para iniciar una faceta solista), Fase, Belanova (quienes al inicio se proyectaban como una banda de rock electrónico) y Hello Seahorse.
En la actualidad la electrónica y el rock se ven más reflejados en proyectos de corte indie, siendo un estilo ya muy marcado en la escena del rock en nuestro país, así como proyectos solamente enfocados en la electrónica.
Comments
0 comments